Gracias por su presencia, ha sido un gusto recibirle.


Si el cambio en su bolsillo pesa más de lo que recuerda, no se alarme, no son solo monedas. Las cosas aquí no se van del todo. Cuando las cortinas se muevan sin viento, una sombra cruce en su rabillo, o despierte con esa sensación extraña… quizá no sea solo su imaginación.


Conserve la tranquilidad, son efectos secundarios menores.
Si una voz le susurra en el silencio cuando menos lo espere, no corra.
Solo dígale del 1 al 5 su experiencia de compra, y vuelva pronto.